Personalmente, la saloma no me apasiona demasiado, pero hay muchísimos piratas a los que les pirra ponerse a cantar en cuanto se les presenta la oportunidad. Por suerte para ellos, no son pocos los relucientes instrumentos musicales que hay a la venta en la tienda de equipo, aunque al principio solo encontrarás una concertina, un banjo, un tambor y una zanfoña la mar de básicos.

Cuando tengas un instrumento en las manos, podrás tocar una saloma aleatoria o sacar tu menú radial de objetos, ir a las salomas y elegir la cancioncilla que se te antoje. Si un pirata empieza a entonar una saloma, cualquiera que esté cerca podrá unirse con el instrumento que desee, así que, como verás, te resultará sencillo montar un grupo improvisado para celebrar el éxito de tu travesía o bien burlarte de tus enemigos mientras se hunden poco a poco en las profundidades. Todo suena mejor si tocas sobrio, pero ha habido reuniones en las que las salomas de piratas borrachos han sido todo un espectáculo...

Aparte de ser divertidos, los instrumentos también tienen sus usos prácticos. Dicen que Merrick reunió un conjunto musical para invocar a un monstruo marino, aunque yo no me creo ni una palabra de esa historia. Pero lo que sí puedes hacer es probar a usar la música para hipnotizar a las serpientes agresivas con las que te topes. Mientras sigas tocando, se quedarán sentadas en trance la mar de felices, lo cual hará que atrapar y transportar a estos pequeños cordones silbantes te resulte mucho menos peligroso.

Algunas áreas del mundo reaccionarán de manera inesperada si tocas música. Ciertos acertijos requerirán que uses un instrumento en una ubicación particular, y aparte de eso, recuerdo que una vez vi a un grupo de piratas legendarios en una taberna tocando una melodía mientras miraban de forma furtiva a sus alrededores. Ahora que lo pienso, jamás supe a dónde fueron…